El Nuevo Testamento nos dice que, al final de día, Abram fue un hombre que encontró la bendición y la promesa de Dios aun cuando, durante su vida, la mayor parte del tiempo, el no tenia ni idea de hacia adonde se estaba dirigiendo. La historia de Abram nos muestra la vida de un hombre que paso por tormentas, desviaciones, retrasos y quebranto en su búsqueda para llegar a casa.
Pero también nos muestra una vida de fe a pesar de las luchas constantes que tuvo que pelear para mantenerse lleno de fe. Y la realidad es que la mayoría de nosotros podemos identificarnos con su vida, es por esto que podemos aprender muchísimo de la vida de Abram acerca de como vivir nuestra vida mientras caminamos hacia las promesas de Dios.